lunes, 12 de junio de 2023

FINAL DEL DIVERTIMENTO

imagen de KatiMask

 




En el comentario anterior recordé el divertimento folklórico que escribí y puse en escena en Chile (1997), bajo el título “La farsa del Caballero y la Muerte”. El argumento cuenta la pugna entre el Demonio y la Muerte. El DEMONIO – el Caballero - desea que “el Hombre viva, porque viviendo se tienta y eso es lo que a mí me alienta a conservarle la vida”, mientras la MUERTE cumple su destino astral: “los salvo pa que no pasen aquí donde tú esperas, que yo domino la esfera donde no alcanzan tus fauces”.
El Demonio, aprovechándose de la pobreza de JOSÉ, un campesino, le ofrece un pacto: si el campesino mata a la MUERTE, le dará la mítica bolsita de oro (el DEMONIO, por designios astrales, está impedido de hacerlo). Así, las diversas peripecias que enfrenta JOSÉ buscando a la MUERTE, y otras tantas su mujer, AMELIA, engañada por la Muerte, provocan que el matrimonio termine en tragedia.
 

EPÍLOGO:
LA MUERTE:
El viento os lleva y trae
en lo que llamáis la vida,
que resulta tan ambigua
sin saber quién es quien cae...
Pero siempre os atrae
lo que a veces os lacera,
tal como a José y Amelia.
¡La sensatez y el absurdo
son el péndulo del mundo!,
lo demás, son las quimeras...
La luz invade sus almas,
las diluye en mil colores
Ya no hay muros, no hay dolores.
Aquí quedan sus fantasmas,
en vosotros, en el magma
de la vida terrenal.
Ellos en su viaje astral,
luego de cruzar el puente,
es decir, por mí, La Muerte,
se han liberado del Mal.
En la tierra no comienza
ni termina la verdad.
Tal vez en la eternidad,
si persiste la conciencia
y perdéis vuestra inocencia,
sabréis que nunca exististeis,
y aun, ni siquiera fuisteis,
que fue bendita ilusión
lo que con tanta emoción
como vida definisteis.
TELÓN
NOTA: Gira financiada por FONDART: agradezco la entusiasta recepción de los espectadores de Chillán, El Carmen, San Carlos, San Fabián de Alico, Trehuaco, Quirihue, Cobquecura, Rancagua, Talca, Concepción, Ancud, y Santiago, en la Sala de la Caja de Compensación.

DIVERTIMENTO FOLKLÓRICO

pintura de Otto Dix




Hace ya varios años, cuando volví a Chile tras 14 años de ausencia (obligada), se me ocurrió escribir una obra de teatro que, sin proponérmelo, fue inspirada por mis vivencias campesinas de infancia y adolescencia. Un “divertimento folklórico”, escrito en décimas campesinas.
Un pacto del Demonio, con un Campesino pobre, fue el meollo del asunto. Título, “La Farsa del Caballero y la Muerte”. Decidí estrenarla en provincia y girar por otras varias de ellas, intentando una vez más, romper con el “centralismo cultural” (todo sucedía en la capital. En Chile, era muy evidente).
En fin, por esa misma causa, nuestras giras a provincia pasaron inadvertidas para la prensa y crítica especializada de la capital. Sin embargo, el público provinciano disfrutó ampliamente del montaje, sobre todo con el personaje de la MUERTE.

El “divertimento folklórico” comenzaba con LUCIFERINA, secretaria de Lucifer:
En estos tiempos que corren
¿quién es el que no hace pacto,
sin pensarlo, así de facto,
al ver que no lo socorren
pa echarle algo al abdomen?
Yo no me atrevo a enjuiciar
que alguien se ponga a pensar
“todos suben y yo bajo,
de qué me vale el trabajo”.
A ustedes toca juzgar.
El Tiempo, que es algo vivo,
no borra ni escribe exacto.
Contar la Historia es un acto
complejo, nada sencillo,
ni espontáneo ni objetivo.
De modo que usted defienda
la memoria de su tienda.
Aprenda del hombre antiguo
que para no ser ambiguo
lo escribió todo en la piedra

martes, 16 de mayo de 2023

DÍA DEL SER HUMANO


Frederick Douglas







Hay personas, mujeres u hombres, que alcanzan su grado máximo de Seres Humanos. Personas que tienen una capacidad extraordinaria de superarse a sí mismos. Aunque nacen en condiciones de miseria y desesperanza, condiciones que normalmente matan la voluntad, la capacidad de ilusión, éstos, conservan su condición humana, no solamente para ellos, sino para ponerla al servicio de los otros.
Si esas personas son esclavos y nacen en un período en que la esclavitud es una institución legalmente aceptada, bendecida y sancionada por la iglesia oficial (“Dios maldijo a Cam, y por ello la esclavitud es válida”)
es doblemente extraordinario el temple de esos Seres Humanos.
Es el caso de Frederick Douglass, un esclavo norteamericano que nació en una plantación en Maryland en fecha imprecisa – los esclavos no tenían derecho a conocer su fecha de nacimiento - de 1918, quien aprendió a leer a escondidas, primero con la esposa del amo de la Plantación, y luego pagándoles a los muchachos blancos de la localidad.
Porque mi intención es estimular la lectura de quienes no conozcan esta lección de humanidad, capacidad de superación y lucha consecuente, proporciono escasos datos de Douglas, un reformador social estadounidense, abolicionista, orador, escritor y estadista afroamericano durante los últimos 50 años del Siglo XIX,
Recomiendo leer su biografía, pero sobretodo las memorias de Douglass, un libro trascendental, titulado en español, “Vida de un esclavo norteamericano, contada por él mismo”. La recomiendo vivamente.

HACIA ARRIBA O HACIA ABAJO

Hallucigenia





Que las ciencias han aumentado nuestro conocimiento, no hay duda, aunque al mismo tiempo han ampliado nuestra ignorancia. Resignación, amistades.
Si se trata del cosmos, hace rato que la Física y la Astronomía nos sacaron del centro del Universo relegándonos a un rinconcillo entre los millones de galaxias...
Si nos ataca el pesimismo, terminamos como aquel filósofo que nos dijo “Solo sé que nada sé”. Pero entonces sacamos de la manga nuestro raciocinio. Eso nos da el consuelo de tener una cualidad que no posee todo el mundo natural que nos rodea.
Aunque el raciocinio es un arma de doble filo. En la medida que los paleontólogos descubren antiquísimos yacimientos de fósiles nos damos cuenta de que la Tierra existió millones de años sin nosotros. Este Planeta no tuvo problemas con nuestra ausencia. Antes por el contrario... Pero bueno, en aras del optimismo evito enumerar las contrariedades que le hemos creado al Planeta.
Me he quedado hipnotizado mirando los fósiles de hace más de 500 millones de años, descubiertos en el yacimiento de Burgess Shale, en la Columbia Británica, Canadá... ¿Mis antepasados...? Quién sabe... Eran la vida, eso es seguro.... Formaron parte de la evolución, evolución que según algunos importantes paleontólogos no ha sido solamente continua..., ha dado “saltos cualitativos...” En definitiva, estos paleontólogos se han atrevido a incorporar “el azar” en la evolución, provocándole saltos a Charles Darwin en su tumba....
“Y diai p´allá” - como dijo el huaso -, “yo no me meto”.
El bicho se llama Allucigenia. Y cualquiera alucina mirándolo.

LA VISITA DE LOS ASTROS


óleo de Honoré Daumier





Una antigua acompañante de los seres humanos ha sido sin duda la astrología.
A pesar del descrédito que le ha inferido el avance de las ciencias, la astrología sigue contando con numerosos adeptos.
Según las estadísticas, por ejemplo, en los Estados Unidos, hay más astrólogos que astrónomos.
Aquí, en el Québec, existe “L’Organisation de Recherches Interactives en Astrologie Naturelle (ORIAN)”, regroupe des astrologues et aspirants astrologues depuis 1978.
En diferentes etapas de nuestra vida, la inquietud o curiosidad por conocer nuestro futuro se hizo parte de nuestra vida social. Entre el grupo de amigos y familiares, nunca faltó el “especialista” que poseía el libro apropiado o simplemente la revista que nos proporcionaba entre risas, a veces seriamente, nuestro futuro destino.
De esa camada juvenil muchos se convirtieron en consultores permanentes, ya no de una revista, sino fueron clientes de un astrólogo o astróloga. Como toda superstición, te somete, te atrapa.
Jugadores de la Bolsa, grandes empresarios, a veces más de algún Presidente, incluso Dictador, han tomado y toman decisiones aconsejados por los astros (los cientos de asteroides descubiertos por la Astronomía que rodean la Tierra, parecen no tener influencia).
Un amigo científico de Carl Sagan, “criticaba la astrología porque sus orígenes estaban envueltos en la superstición. Pero eso, dice Sagan, también ocurre con la religión, la química, la medicina y la astronomía, por mencionar sólo cuatro temas. Lo importante no es el origen vacilante y rudimentario del conocimiento de la astrología sino su validez presente”.
Y aunque parezca increíble luego de 4000 años, pese a que las ciencias consideran la astrología una superstición, para mucha gente continúa teniendo validez.
Claro, ¿quién no se ilusiona con la posibilidad de conocer el mañana?

CREER O NO CREER, ESA ES LA CUESTIÓN


óleo de Honoré Daumier 





Resulta sorprendente la incredulidad internacional, generalizada, sobre los medios de comunicación. Similar a la desconfianza en la política y políticos. La gran mayoría estamos convencidos que ambos sectores mienten de acuerdo con sus intereses. Ante cada información conflictiva, o declaración política de la misma índole, si no tenemos la buena costumbre de tomarlas con pinzas, corremos el riesgo de vivir una realidad manipulada al servicio de intereses ajenos. No es fácil discernir, generalmente la política está ligada con la economía.
Pero he aquí la contradicción: respecto del mundo de las capacidades sobrenaturales que muchos dicen poseer, operaciones síquicas a distancia y sin anestesia, astrólogos, interpretadores de sueños, curadores a través de la meditación, cartomancia, quiromancia; en fin, innumerables poseedores de poderes misteriosos. Todo ese mundo especulativo cuenta con una alta cuota de credibilidad. Porque claro, nunca falta alguien que a través de esos medios ha logrado resultados positivos (varias enfermedades denominadas psicogénicas, por ejemplo). No así cuando intentan hacer crecer un brazo o una pierna que falte.
A pesar de todo, en general, sentimos la necesidad de buscar la protección de algo que esté más allá de nosotros y que sea inalcanzable.
He dejado afuera a los magos, la magia consiste en entretenidos y fascinantes trucos, a la excepción de algunos magos estafadores que intentan convencernos de poseer poderes sobrenaturales. Varios de estos últimos fueron desenmascarados por el famoso Mago James Randi, que dejó su carrera a los 60 años, dedicándose precisamente a restablecer la magia en su esencia, como un maravilloso espectáculo de habilidad.
Y remato este comentario con una frase del filósofo Francis Bacon en Novum Organon: “PORQUE EL HOMBRE CREE CON MÁS DISPOSICIÓN LO QUE PREFERIRÍA QUE FUERA CIERTO”.

lunes, 1 de mayo de 2023

LOS REVOLUCIONARIOS DE LA CANCIÓN CHILENA

 

Victor Jara y Patrio Manns,. Fotografía  de Joaquín Eyzaguirre







Mi amigo Joaquín Eyzaguirre Guzmán, tuvo la buena idea de subir a la red a dos grandes de la música chilena, los autores e intérpretes, Patricio Manns y Víctor Jara. Sentí gran placer verlos juntos en la fotografía. Con ambos, me unió una hermosa amistad en diferentes momentos de su vida.
Con Víctor, nos conocimos y compartimos amistad en la Escuela de Teatro de la U. de Chile, afecto que se mantuvo en los años. Durante nuestro desarrollo artístico profesional, tuve el placer de ser dirigido por Víctor en dos puestas en escena: en el Teatro ICTUS, y en el Teatro Nacional de la U de Chile.
La calidad y popularidad de sus canciones opacó su magnífica labor teatral, destacada sin embargo por la crítica especializada y espectadores amantes del teatro.
Su canción, “Te recuerdo Amanda”, llenó el corazón de millones de chilenos y latinoamericanos, entre los cuales me inscribo en primer lugar, a pesar de que destacar una canción, no hace justicia a la calidad de tantas otras suyas. Joan, preserva su memoria.
Con Patricio, sucede algo similar: “Arriba en la Cordillera”, provocó un salto artístico y cultural en la canción chilena. La emoción que provocó y continúa provocando esa canción, como todo fenómeno artístico, es imposible transferirlo a otros. Sin embargo, su éxito y vigencia dan cuenta de su calidad. Calidad, que también opacó su creación literaria en novelas y poesía.
Fue en 1959, mientras Patricio era encargado de Cultura en el diario La Patria de Concepción, que nos conocimos mientras me hacía una entrevista para dicho diario.
No compartí con él en los posteriores años de su fulgurante éxito, sino mucho más tarde, durante el período del gobierno de Allende. Compartimos ideales políticos similares. Ideales que provocaron nuestro exilio en diferentes países, hasta reencontrarnos de regreso en Chile, donde continuamos nuestra amistad inquebrantable, amistad que Begoña y yo compartimos con él, y su amada Alejandra.
Gracias Joaquín, por ese aporte gráfico a la red.

EL PAN DE HOY Y EL PAN DE MAÑANA


de la red





Durante mi infancia y buena parte de mi juventud, a propósito de mi relación con sectores campesinos, viví rodeado de fantasmas: historia de curanderas - un poco brujas -, gente “milagrera”, especialista en hierbas para todo uso; también gente experta en interpretar sueños, en fin, un ambiente en el cual el límite entre la realidad y la fantasía no tenían mayor importancia. Felizmente, la Inquisición, era asunto del pasado. Cristo, y su corte de respetables santos y sagradas vírgenes, los protegía del Diablo y sus diabluras.
A pesar de todo nunca tuve sueños premonitorios ni experiencias paranormales. Supongo, fue el escepticismo de mi padre – herencia del suyo –, que a partir de los 8 o 10 años no confundiera el mundo mágico con la realidad.
Antes de esa edad, era difícil no creer en las maravillosas sugestiones que creaba el silencio nocturno campesino, las brasas del fogón y dos velas desvaídas...
Días atrás, releyendo algunas páginas del “Mundo y sus Demonios”, del norteamericano Carl Sagan, magnífico divulgador científico (falleció en 1996), me encontré con varias páginas dedicadas al fenómeno social que provocó la supuesta aparición de OVNIS en los años 80-90.
Muchos norteamericanos que testimoniaban haber sido abducidos por extraterrestres hicieron que me preguntara si esos relatos hubieran provocado los mismos sentimientos de aquellos a la luz de las velas.
En el instante de pensarlo sentí que traicionaba mi inocencia de los años 40 del Siglo XX.
Gustoso prefiero la magia de aquellos años. Ningún “cuenta cuentos” de entonces necesitaba psicoterapeuta, varios de éstos, dudosos científicos: descubrieron un pingüe negocio induciendo al supuesto abducido para que reafirmara en su memoria un hecho inexistente.
En fin, prefiero traer a mi memoria la clara luz del verano, y las cinco o siete mujeres vestidas de negro bajo el castaño, que, salmodiando, invocaban al viento para que ayudara a separar la paja del trigo... Y el viento venía, estimadas amistades..., el viento venía... Los hombres, sonrientes, lanzaban las palas de trigo al aire..., las doradas cañas volaban y el trigo caía pesadamente en la era... El pan de hoy y el pan de mañana...

domingo, 23 de abril de 2023

Y NO ES PELÍCULA



Fotografía de Sebastiao Salgado





Me resulta tan alarmante la arbitraria violencia armada que está sucediendo en los EE. UU., que no puedo dejar de rogar a las juventudes de diferentes países que no permitan que tal arbitrariedad se apodere de los suyos. Mantengo la esperanza que la juventud sabrá encontrar el camino de los cambios que aseguren los servicios sociales, pero sin necesidad de matarse unos a otros.
Me aventuro a pensar que, en los EEUU, el publicitado “sueño americano”, ha creado una gran frustración social en miles de habitantes de ese país, creando una violencia anidada en lo que algunos llaman el “inconsciente colectivo”.
Las grandes mayorías tienen claro, que no todos pueden realizar el sueño de enriquecerse en dólares en tres semanas. Está claro que la libertad y la igualdad ante la justicia no son beneficios que reciba todo el mundo. Y el racismo, un prejuicio que resulta aún más estúpido en un país formado y desarrollado por miles de inmigrantes, cobra sin embargo hasta el presente, una cuota diaria alarmante de víctimas.
¿Cuántos muertos tenemos hoy? Es la noticia diaria de la televisión y diarios norteamericanos. Las propias juventudes norteamericanas están comenzando a movilizarse en contra de la violencia con armas de fuego: no puede ser un “derecho civil” matarse unos a otros. La NRA (National Rifle Association) no puede seguir esgrimiendo la “segunda enmienda” para continuar con el negocio de las armas.

NADIE ESTÁ A SALVO



de la red, fotografia que figura como anónimo







Tal vez voy a decir una herejía: pero es explicable el consumo de opiáceos en los EEUU, y hasta es comprensible. De cinco miembros de una familia norteamericana, uno muere asesinado por arma de fuego. Y en lo que va del presente año, han muero 140 personas, a causa de tiroteos en diversos lugares públicos, incluidos Escuelas, Hospitales, Mercados, Colegios, Sinagogas, iglesias, etc. Las cifras estadísticas se modifican a diario, para peor.
La facilidad para adquirir un arma de fuego en el comercio – incluida un arma de guerra – es sencillamente irracional. Se dan casos en que un muchacho de 17 años, falsificando su identidad, obtuvo un “fusil de asalto” con el cual mató a varios niños en un Colegio.
De Google:
“La Asociación Nacional del Rifle (NRA; en inglés: National Rifle Association of America) es una organización estadounidense cuyo fin es la defensa del derecho a poseer armas tanto para la defensa personal como para actividades recreativas. Se fundó en Nueva York en 1871, por lo que se considera la organización de derechos civiles más antigua de los Estados Unidos. El club posee 5 millones de socios.”
Y he ahí, la madre del cordero. Nadie ha podido restringir la compra de armas de fuego, incluidas las armas de guerra.
Según se dice, la NRA financia constantemente las campañas electorales de diversos políticos, otorgando además jugosas prebendas. ¿Serán rumores infundados?
Los tiroteos en lugares públicos en EEUU “son el pan de cada día”. Quizás, sea la sociedad más insegura que exista en la actualidad. Son los propios norteamericanos que no saben si volverán a ver al amigo que los ha visitado cuando lo despiden de su casa.
Quienes vivimos en otros países, mantengamos la esperanza que tal violencia no sufra el “efecto mariposa”.

LA RESPUESTA DE LOS HECHOS


Fotografía de  Idoia  Prieto  Zabala 







Alguien dijo que “el hombre es un animal de costumbres”. Y qué puedo responder, estimadas amistades. Debido a una tempestad de “pluie verglaçante” (lluvia con nieve) que azotó a gran parte del Québec, un millón trescientos mil habitantes, quedamos sin electricidad desde el miércoles 5 hasta el viernes 7 en la noche. Tres días, con el comercio cerrado y los pocos que pudieron abrir, contando con generadores, solo podían vender pagando cash (billetes). Con la existencia de las cartas de crédito hemos perdido el hábito de tener dinero en casa o en los bolsillos, y las cajas de los Bancos no tenían electricidad. De manera que hubo que rebuscar en el refrigerador lo que quedara, y eso, antes que los alimentos se descompusieran. Comida fría durante tres días, y en el caso nuestro, con visitas de la hija y nietos que viven en Inglaterra.
Gruesas ramas del árbol que tenemos frente a casa se desgajaron con el peso de la “pluie verglaçante”, desastre que ocurrió en numerosos lugares del Québec.
Cuando las baterías de los celulares se agotaron, quedamos sin comunicación con el exterior. Por supuesto sin televisión, sin internet, sin noticias fuera de casa. Aunque intentamos divertirnos entre nosotros – felizmente nos queremos unos a otros -, por momentos, la oscuridad y el silencio lograban crear una atmósfera incierta...
Las velas, nos devolvieron a la Edad Media.
Cuando el viernes en la noche se restableció la electricidad, nuestro corazón saltó de alegría. En realidad, fue nuestro sistema nervioso que se agitó jubiloso, ese primitivo aparato que se desarrolló en nosotros antes del fuego y de la luz, y que, dadas las circunstancias, el viernes, se conectaba con nuestro pasado, en tanto especie... La luz fue nuestra protección...
¿Hydro-Québec podrá actuar con mayor eficiencia en futuras emergencias?
¿Somos un animal de costumbres?
___________
La fotografia es de Idoia Prieto Zabala.

¿Y CÓMO ANDAMOS POR CASA?



 Rodney






Supongo que mucha gente habrá tenido la experiencia de estar leyendo algún texto de historia, Siglo XIV, Siglo XV, por ejemplo, y en la medida que avanza la lectura comienzan a asomar similitudes con los acontecimientos presentes de la humanidad... En mi caso, detengo la lectura... Comencé a propósito de mi inquietud sobre la importancia social de los prejuicios. ¿Las similitudes que encuentro, no serán precisamente mis prejuicios?, me pregunto.
Porque, claro, el tema del “prejuicio” tomó un camino trágico en el libro que he escogido: “El Martillo de los Brujos”, una suerte de decálogo para detectar y castigar la brujería, los pactos con el demonio, herejías de todo tipo, etc. La Inquisición fue un momento negro no sólo para la Iglesia Católica, sino para la humanidad entera. Un momento negro que, aunque en menor intensidad, no concluyó “oficialmente” sino hasta mitad del siglo XIX.
Como no es mi intención meterme en asuntos de Fe, solamente me interesa referirme al daño que un “pre- juicio” puede hacer socialmente. Y la Inquisición es una evidencia.
En política, también hemos visto, a veces hemos sido testigos, o víctima, de los momentos históricos cuando una norma se convierte en dogma, y éste, estimula el prejuicio de manera notable.
El racismo, la xenofobia y la homofobia, entre otras lindezas, encuentran en el prejuicio, el ingrediente impulsor capaz de agredir a personas o países. Y no es fácil reconocer nuestros propios prejuicios.
Amistades, me temo que “El Martillo de los Brujos”, es un libro que muchos intentan reescribir actualmente en varios lugares, incluso, en países que hasta ayer se proclamaban como líderes de la libertad.
Estimadas amistades, no estaría demás, que de vez en cuando revisemos nuestros “juicios”. Saludos.

NOS LLEVA EL INFINITO



autor desconocido de momento es muy poisble que sea r. Smith







Actualmente, me parece tanta la complejidad de nuestra interrelación humana a nivel internacional que, si me detengo un momento en ella, me provoca una suerte de aturdimiento. Claro, vengo de un mundo mucho más pequeño durante mi infancia y aún todavía en mi adolescencia. En ese entonces todo me parecía más manejable: teléfono tuvimos recién cuando mi madre inauguró su Clínica Maternal en Chillán (una temeridad de pequeña empresa, para una ciudad de provincia en los años 50). Victrola – gramófono -, un gran bien técnico para la época, como así mismo la radio; y finalmente, el periódico de la ciudad que mi padre compraba los domingos.
Santiago, la capital, era nuestra gran perspectiva para adultos y niños. Lo que allí sucedía era vital para el resto del país.
Mis padres tuvieron noticias generales de la Primera Guerra Mundial, y luego de la Segunda, la radio emisora y periódicos, actualizaban en detalle lo que ocurría allá lejos. Y a mí, niño aún, me parecía una novela de aventuras, hasta que en el 45 tomé plena conciencia de la tragedia, y como a la mayoría, nos convencieron de que esa tragedia, sería una última horrible lección para la humanidad, una lección que no se repetiría.
¿Cabe comparación entre el Hoy y el Ayer?
¡Heráclito, Heráclito...! Todos vamos contigo, porque al igual que tú, somos una “nanopelusa” del Infinito....

HÁGASE LA LUZ



from the net







Según las ciencias “la oscuridad no existe, es solo ausencia de luz”. Mecachis la mar, como decía un querido amigo. ¿Que no existe? Mi amigo Vitelio nunca lo aceptó. Apagaba las luces del salón, permaneciendo largo rato a oscuras. Sin embargo, estando así, no podía ver claramente la oscuridad, de manera que encendía la luces bruscamente con la idea de sorprender a la oscuridad... Según me contó su prima, Vitelio, murió hace ya muchos años, en el Psiquiátrico de Santiago de Chile.
Sin embargo, Diógenes, el filósofo griego, no buscaba la oscuridad con su linterna, sino “al Hombre”. Y nadie lo trato de loco, quizás de extravagante. Su anécdota con Alejandro Magno es ejemplar: “En qué te puedo ayudar”, le dijo Alejandro Magno. Diógenes, más pobre que las ratas, le contestó: “Córrete un poquito p’allá, que me estás tapando el sol”.
Personalmente, participo de la idea de aquellos que piensan que el colectivo humano, en tanto colectivo, tiene una tremenda ausencia de luz. El afán de poder, la codicia, y otros tantos caramelos, nos han hecho vivir en la oscuridad de las guerras, en el afán constante de ver al “otro”, como potencial enemigo. En la actualidad yo soy habitante del “Occidente”, pertenezco a la luz. Quienes habitan en Eurasia y sus alrededores, son el “otro”, la oscuridad.
Hace un par de días vi un documental sobre una secta religiosa llamada Davidianos, que se instaló en Waco, Texas (1993). La dirigía un muchacho, David Koresh, quien se autodenominó “el Mesías en su segunda venida a la tierra”. Y contó con algo de 80 personas que le creyeron, rindiéndole incondicional culto. La secta terminó en la oscuridad total, enfrentados al FBI norteamericano, muriendo quemados 43 adultos y 21 niños.
Una oscuridad similar, se cierne sobre un significativo número de norteamericanos que están rindiendo culto a un expresidente, un hombre empapado de egolatría clínica, que a toda costa intenta llevar al país a la más extrema oscuridad cultural y a la violencia sin límites.
De manera que aquí estoy: no sé si encender la luz o quedarme a oscuras.