Mostrando entradas con la etiqueta Pido por lo bajo. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Pido por lo bajo. Mostrar todas las entradas

lunes, 2 de mayo de 2011

PIDO POR ABAJO


de Otto Dix, les joueours de Skat

En los diferentes juegos del cubilete con los 5 dados, hay un juego que en mi país se llama “Dudo”. Es un juego muy entretenido que fluctúa entre la verdad y la mentira. Muchos jugadores, desconfiando de su suerte, antes de levantar el cubilete y ver su resultado, dicen: “Pido por abajo”. Como se sabe los valores de los dados, cambian entre sus caras contrarias.


Para mí, como simple consumidor y “recurso humano”, hace años que las fuerzas que deciden en este mundo, me tienen jugando al Dudo. Como norma, ante cualquier información de los medios oficiales u oficiosos, “pido por abajo”.


¿Los diarios o la TV intentan venderme una lavadora como la mejor y más barata del mercado? Pido por abajo. ¿Me informan que tal o cual político defiende mis intereses de ciudadano en el parlamento? Pido por abajo. ¿En España han prohibido la participación democrática en las elecciones de un grupo de izquierda, porque supuestamente tiene vínculos con ETA? Pido por abajo. ¿O que tal vez la OTAN y los EEUU defienden mis intereses de “Consumidor” y “Recurso Humano”, invadiendo o matando gente allende los mares? Pido por abajo. ¿O que han matado a Bin Laden, sin juicio, sin proceso, así nomás, al estilo mafia? Además, ¿diciéndome que, antes que cante un gallo, lo han tirado al mar? Pido por abajo.


Señores, que tengo la edad que tengo: “¡Pido por abajo!”. Yo nunca he estado de acuerdo con las acciones terroristas, vengan de donde vengan. Eso está claro. Pero tampoco estaré de acuerdo con el atropello a la soberanía de los pueblos. Ni siquiera me hubiera gustado que alguna fuerza extranjera nos hubiera librado de Pinochet. Como también me pareció intolerable que ese ladrón de siete suelas nos fuera impuesto y defendido, precisamente por fuerzas extranjeras.


¡Qué parecidas son las vidas de un animal depredador y estos poderes omnímodos que insiste en crear el Hombre! ¡Y qué similar es la historia del ascenso, descenso y extinción de los imperios, con sus capitanes y emperadores!

舉起手來: ¡Arriba las manos!

跪: ¡Arrodíllate!

Agradeciendo a Google, aprovecho de enseñar esas palabras en chino, con todo cariño, a mis bisnietos y sus contemporáneos.