Elizabeth Moss |
Ayer, leyendo en la Presse, un elogioso comentario sobre la escritora canadiense Margaret Atwood, coincido plenamente con esos elogios. Margaret Atwood, ha saltado a la fama internacional a propósito de la adaptación para la televisión (Amazon) de su novela The Handmaid’s Tale (La servante écarlate). Novela escrita en 1985 que, según sus propias palabras “en los años 90 tenía la impresión que esta distopía había perdido su vigencia. La elección de Donald Trump cambió todo. La marcha de las mujeres sobre Washington y el nuevo contexto político norteamericano modificó completamente la recepción de la serie. Había creado una fantasía, que terminaba convirtiéndose en un programa de reality show”, agrega Margaret, sonriente. “La gente no me decía tanto, tienes una imaginación desenfrenada, si no más bien, ¿cómo lo supiste?”.
Y sí, de acuerdo a cómo va el mundo, y sobre todo, conociendo las intenciones actuales de Trump y su secta republicana, volveríamos a repetirle la pregunta a Margaret Atwood “cómo lo supiste?”
No es la primera vez que una ficción artística se convierte en un fenómeno premonitorio.
La novela para la televisión ha sido adaptada por Bruce Miller, protagonizada por reconocidas actrices y actores (Elisabeth Moss) constituyéndose en un éxito internacional para Amazon. Una serie excelente que vale la pena ver.
En fin, termino este comentario sonriéndome, porque pareciera un aviso publicitario. Sin embargo, dejo constancia, que ni la autora ni Amazon, me han pagado un centavo.