lunes, 12 de septiembre de 2022

EL HUMOR INTELIGENTE, UNA VIRTUD



imagen de la red






Buscando en la Red, informaciones sobre el “Creacionismo Científico”, me encontré con un “pdf” titulado “El Diario de Adán y Eva” (en español
), cuyo autor es nada menos que Mark Twain. Obviamente, no lo conocía. Ajeno a la polémica entre creacionismo y evolucionismo, Mark Twain, nos ofrece un entretenido libro, que a veces mueve a carcajadas, escapando inteligentemente de las implicaciones teológicas.
A quienes no conozcan el libro, se los recomiendo vivamente, convencido que durante su lectura gozaréis de buenos momentos.
Y, claro, debido al talento del autor, mujeres y hombres nos sentimos graciosamente aludidos en este Diario de Adán y Eva. Es parte de la entretención.

LAS MALAS COSTUMBRES SE PEGAN

pintura de Roberto Matta






Es un refrán que solían repetir las personas mayores durante mi infancia y adolescencia. Y miren por donde, resulta que tenían razón. Lo digo, a la luz del pernicioso contagio del uso de armas de fuego que desde los EEUU está llegando a Montréal, evidentemente de manera ilegal. Aún resulta sorprendente informarnos que la criminalidad vía armas de fuego se ha convertido en un hecho frecuente en Montréal y alrededores. Y el tráfico de armas a través de la frontera norteamericana es actualmente un pingüe negocio, no sólo para los delincuentes habituales, sino que se han incorporado nuevos “comerciantes”.
Y no creo estar equivocado, pensando en que usted, viviendo en una ciudad lejos de los EEUU, seguramente también es testigo del aumento de la delincuencia en su país. Cualquiera saca revólver o pistola hoy día, asaltar con cuchillo o navaja, “es cosa de rotos”.
Al parecer, no solo la pobreza o el abandono social estimula la delincuencia. Supongo que será quizás, sobre todo, la pérdida de la esperanza colectiva, y no necesariamente única. Es demasiado evidente el enriquecimiento ilegítimo de unos pocos a costa de los muchos.
¿Emergerá quizás una nueva generación capaz de restablecer la esperanza como afán colectivo?
Finalmente me pregunto, ¿algo de esto concierne también a los políticos?

domingo, 11 de septiembre de 2022

APRUEBO, NO ES EL FINAL, ES EL COMIENZO.









La Nueva Constitución en Chile que se plebiscitará el próximo 4 de septiembre, esperamos que cuente con el voto de Apruebo de quienes tienen la convicción que estarán votando a favor de un País plurinacional y más digno. Deseamos que sea la gran mayoría.
La campaña de mentiras que ha difundido la Derecha en contra de la Nueva Constitución no ha tenido otro fin que defender sus codiciosos y egoístas intereses. Intereses de enriquecimiento desmesurado que ha impedido a las grandes mayorías el acceso a sus derechos a la salud, educación, vivienda y salario digno, entre otros muchos.
La Nueva Constitución no contiene una revolución, sino una mayor participación, simplemente rescata los derechos sociales que les han sido arrebatados a las grandes mayorías. Mayorías que, a mi juicio, deberán organizarse para implementar la Nueva Constitución, que, a no dudar, contará con el boicot y oposición permanente de la atávica ultraderecha chilena.
El triunfo del Apruebo será así, no el final, sino el comienzo de un sostenido trabajo de la convicción organizada.

INTERRUPCIÓN DEL TIEMPO





No sé si será habitual, pero mientras más avanzo en edad, la memoria retrocede con más porfía: mi infancia, la de mis hijos, y la infancia de mis nietos, cada día se hace más nítida en mi recuerdo.
Mis nietos Lander, Eneko, Kai, Aiala y Maider (por orden de aparición), tuvieron la suerte de nacer cuando la posibilidad de dejar un testimonio fotográfico es tan simple como hacer clic en el teléfono celular. Sin embargo, durante mi infancia, ya saben, había que disponer de una cámara, un “rollo” de película y un especialista en el “revelado” (Estudio Fotográfico).
Pero, claro, la fotografía es una brevísima “interrupción”, el tiempo sigue su marcha inexorable. Situación que provoca un doble efecto: ilusión y angustia: quisieras que la interrupción detuviera el tiempo.
Mi nieto mayor, Lander, que vive en Brighton, Inglaterra, hace pocos días me envió la lectura de un fragmento de “El Viejo y el Mar” (Hemingway) para saludar mi cumpleaños. Lógicamente lo leyó en inglés, su lengua.
Pero amigas y amigos, Lander, además de haber alcanzado un tamaño de gigante – casi dos metros – tiene una voz tan profunda que resulta imposible reconocerle. Porque, claro, mi memoria insiste en la “interrupción del tiempo”: él y yo, intentando hacer una pizza en aquel entonces.
Mi corazón se confunde, porque ayer cuando le abrazaba, Lander apoyaba su cabecita en mí a la altura del estómago. Sin embargo, la última vez que le abracé, mi cabeza se posó en su pecho. Su voz resonó en mi oído: “Te quiero, aitxitxe”.
Algo similar ocurre con mi hijo menor, Álvaro, un hombre canoso, barbado, quien vive en México con su esposa. Al menos, es alentador que no me llame padre ni papá, sino “Puro” (expresión cubana), y me deja contento.

OH, EL ESPÍRITU.

Mary Baker





Stefan Zweig, como muchos saben, fue un prolífico, talentoso y múltiple escritor, nacido en Viena (Imperio austrohúngaro) en 1881.
Yo no conocía sus tres magníficas biografías de Franz Mesmer, hipnotista del siglo XVIII, Mary Baker Eddy, fundadora de la Ciencia Cristiana, y Sigmund Freud, padre del psicoanálisis. Las tres, bajo el título “Curación del Espíritu”.
Me ha dejado impactado el personaje de Mary Baker. Stefan Zweig, cuenta la vida de ella convirtiéndola en un formidable personaje de novela.
Zweig, tiene otras dos biografías de personajes femeninos que le han otorgado su bien merecida fama. Sin embargo, ésta, de Mary Baker, norteamericana, no desmerece ante ellas. Una mujer que se mueve entre el interés pecuniario y su misión espiritual, con una personalidad obsesiva, angustiante, paradojalmente solitaria.
La egolatría y el narcisismo siempre son ingredientes que aportan un “plus” a los personajes reales o de ficción. Sean sus acciones admirables o detestables, los ingredientes mencionados aportan a esos personajes una fuerza de voluntad singular. En el caso de Mary Baker, su contradictoria conducta la enfrenta a violentas crisis emocionales y físicas. ¿Qué habría dicho Freud? Ante la angustiosa soledad de Mary Baker, su “misión” es el refugio. Allí donde otros seres humanos se derrumban, Mary Baker, sale fortalecida. Generosa, egoísta, convencida que su razón es la única válida..., no son pocas las víctimas que deja su carácter. Pese a ello, llega a la vejez santificada por sus fieles. Mary Baker, descrita por Zweig, es un personaje femenino apasionante

miércoles, 10 de agosto de 2022

TE ABRAZO EN MI CORAZÓN

Inolvidable María de las Nieves, me sorprendo a mí mismo recordando tu cumpleaños hoy, 5 de agosto. No te imaginas cuánto agradezco el cariño que como madre me prodigaste.
Esa seguridad emocional, me ha servido para toda la vida.
Y he decidido poner esta foto tuya, porque fueron los tiempos en que enamoraste a mi padre, y cómo no...
Te abrazo en mi corazón.







martes, 26 de julio de 2022

EMOCIÓN INTRANSFERIBLE

Nelson Villagra, José Ignacio García y Begoña Zabala Aguirre  en ,

La Amante Inglesa, de Marguerite Duras , dirección de Jaime Siva, 

Y Ópera Inmóvil de  Jorge Díaz, dirección de Nelson Villagra G.

Teatro  El Conventillo . Santiago de Chile .  Año 2000





Que el Arte Teatral sea efímero le otorga una cualidad trascendente. Como espectadores, en estricto rigor, nunca veremos el mismo espectáculo dos veces. Entre una función y otra, siempre captaremos nuevos matices, mejores o peores. La interrelación emocional de la actriz o del actor con los espectadores, es única, irrepetible, misteriosa, difícil de explicar.
Al mismo tiempo, a los espectadores tampoco les será fácil transmitir, explicar la emoción vivida durante el espectáculo. Actores, técnicos y espectadores, formamos parte del Arte Teatral.
Junto con Bego, realizamos varios montajes teatrales en Chile entre 1997-2004. Nos resultó sorprendente la recepción elogiosa que tuvimos por parte de los espectadores y la crítica especializada. Bego, como actriz extranjera, pasó brillantemente la prueba, imponiendo su calidad artística, comenzando con El Señor de las Luces – de mi autoría -, en La Amante Inglesa, de la autora francesa, Marguerite Duras, dirigida por Jaime Silva. Y con el mismo director, la obra minimalista de Samuel Beckett (Rockaby). Además (Ópera Inmóvil), bajo mi dirección, del autor chileno Jorge Díaz, y en un “divertimento teatral” en versos de mi autoría, La Farsa del Caballero y la Muerte.
Si todas las actuaciones de Bego fueron brillantes, quizás, fue el personaje de La Amante Inglesa – Claire – quien le permitió desplegar aún más ampliamente su magnífico talento de actriz. Me atrevo a decirlo, porque lo confirmaron, primero, los espectadores, y luego la crítica especializada: “Tampoco está en discusión el manejo actoral de Nelson Villagra (Pierre), ni la sólida y sorprendente labor escénica de Begoña Zabala (Claire), la actriz vasca que comienza a darse a conocer en las salas santiaguinas” (diario La Tercera). “Ciertamente es una obra en extremo dura, seca y cruel, cuya teatralidad escueta radica fundamentalmente en el trabajo actoral. Nelson Villagra y la actriz Begoña Zabala con actuaciones de gran exigencia, tienen desempeños brillantes”, (El Mercurio).
Y sin embargo..., y sin embargo... Lo he dicho: el Arte Teatral es efímero... Toda esa emoción que he descrito durante nuestras presentaciones en Chile, los elogios, toda esa maravillosa experiencia estética, solo ha quedado en la memoria del instante..., irrepetible e intransferible.

EXCITACIONES DEL ALMA









Nelson Villagra G.   El Señor de las Luces 








Los comentarios entusiastas que ha merecido la inserción de la película El Regalo en mi página de Facebook, me alegran una vez más, en tanto miembro del equipo artístico y técnico del film. Vuestros comentarios me han resultado como renovados aplausos, y en Chile los he recibido personalmente en variadas ocasiones.
A propósito, nunca se me ocurrió grabar los aplausos, digo, tenerlos hoy, como se guardan las fotos o la esquela de felicitación. Sería tema para un cuento o novela: “El viejo actor, tendido en el sofá de su despacho, mientras recordaba sus actuaciones pasadas, miraba la foto de El Señor de las Luces, escuchando además los cálidos aplausos que su actuación había provocado. Su ego, se hinchaba hasta ahogarlo, latiendo más fuerte que su propio corazón...”. ¡Gau!, menos mal que nunca se me ocurrió tal idea.
“El Señor de las Luces”, fue la obra de mi autoría con la que regresé a Chile desde mi exilio, luego de 15 años. Fue gracias al Plebiscito de 1988 que la dictadura hubo de permitirnos la entrada a los últimos 100 que estábamos impedidos de hacerlo. De tal manera que lo hice en 1989, y con una obra de teatro.
Pero volvamos a los aplausos. En la noche del estreno de la obra mencionada, cuando mi personaje – Le Savant -, entró a escena, los espectadores rompieron en un caluroso y prolongado aplauso, saludando mi regreso al país.
Amigas, amigos..., la sorpresa y emoción que me provocó aquel gesto del público está más allá de las palabras... Felizmente, mi personaje hacía su entrada a escena sentado en una silla de ruedas... No sé qué habría sucedido si hubiera ingresado caminando.
Bego, quien me acompañaba como actriz, se aferraba a las cortinas entre bambalinas, emocionada. Ambos sabíamos lo significante de aquellos aplausos..., inolvidables...
Desde aquí, desde Vaudreuil-Dorion, si alguien que hoy lee estas líneas, fuera, además, uno de aquellos espectadores, las ondas energéticas que excitan mi alma con este recuerdo le darán a ella o él, un fuerte y caluroso abrazo. Gracias a todos.

viernes, 8 de julio de 2022

¿UN ASTROFÍSICO CALLEJERO?





Mendigo, de Amey Cárdenas 





Durante mis años de estudiante en la Esc. de Teatro de la U. de Chile, el centro comercial de Santiago estaba en la calle Ahumada. Allí solía cruzarme con uno de los tantos pordioseros. Además del lisiado que decía ser Gardel luego del mortal accidente aéreo, había otro, muy singular, quien arrinconado contra un edificio, cantaba intermitentemente una cancioncilla, una especie de vals, a media voz, soltando una espasmódica carcajada al final, sacudiendo la cabeza mientras estiraba el brazo con su tarro de la limosna. Muchos peatones nos deteníamos a escucharle, echándole alguna moneda. Yo lo escuché varias veces, en realidad, muchas veces. Me resultaba un personaje misterioso:
“Este Globo, gira y gira/con la gente, toda arriba/se vislumbra con la vista/el espacio sideral.../¡Ay, qué bien hecho!/ No compramos los pasajes, / pero vamos en el viaje/aunque nadie sabe adónde/ ni se ha visto al Capitán.../¡Ay, qué bien hecho!”, y soltaba la carcajada cubriéndose la boca intentando disimular la falta de dientes. Los transeúntes le acompañábamos con una sonrisa mientras depositábamos las monedas.
Una vez, me decidí a preguntarle detalles sobre la cancioncilla que me resultaba curiosa. Pero él solo se limitó a sonreír con su boca desdentada sacudiendo la cabeza. Nunca logré una respuesta, incluso el día en que le ofrecí un billete. Lo aceptó, pero guardó silencio con la cabeza escondida en su pecho. Ese día aguardé un par de minutos. Escondida la cabeza en su pecho ya no sonreía. Me sentí incómodo, impertinente. Me marché... Nunca supe detalles de su vida...
Ha sido releyendo entretenidos párrafos de un libro de Hubert Reeves, astrofísico canadiense (creo que él se autodefinió como Québécois), quien me trajo a la memoria aquél singular pordiosero. “Poussières d´Étoiles” (Polvo de Estrellas), se titula el libro de Reeves. Desgraciadamente - que yo sepa -, está solamente en francés e inglés. La astrofísica intenta explicar la magia de nuestra existencia. Intenta descifrar el “truco”, la maravillosa insistencia de la naturaleza en desarrollarse.
“Este Globo, gira y gira/ con la gente toda arriba...”

miércoles, 6 de julio de 2022

CUANDO LA MAGIA PIERDE SU ENCANTO





paisajes de la red





Es lamentable que todavía, según demuestran los acontecimientos actuales, la contracultura norteamericana mantenga un dominio predominante en los EEUU. Un dominio que, ayer como hoy, ha tenido su contraparte racional, aunque hasta el momento no ha sido capaz de vencer el oscurantismo supersticioso de la contracultura violenta y racista en el poder.
A muchas personas les parecerán inexplicables los acontecimientos actuales, comenzando por la actitud irracional de quienes se oponen a seguir las orientaciones de los médicos para contener el Covid-19, en un país que tiene tan significativo número de premios Nobel en ciencias, adelantos tecnológicos y una industria desarrollada. Más aún, un país que cuenta con esclarecidos intelectuales y talentosos artistas.
Sin embargo, en ese mismo país, destacado por su política internacional trágicamente agresiva, al mismo tiempo existe tal proliferación de magos con pretensiones de poseer poderes mentales, que la magia pierde su encanto; pasada la peste de los Ovnis, el testimonio de los “abducidos” sigue contando con numerosos adeptos en ese sector social; existen cientos de curanderos; psíquicos que hablan con los muertos; poderes paranormales – desprestigio de la parasicología -, que cuentan con “Institutos de Investigación”, cómo no, si hay que descifrar los mensajes de quienes han sido teletransportados a Júpiter, regresando a la tierra con sendas revelaciones del más allá, etc., etc.
En fin, es un amplio sector social norteamericano en que la ciencia es denostada por la “pseudociencia”, actitud que cuenta con el respaldo de algunos pastores evangélicos que, curiosamente, son los millonarios del condado respectivo (a veces del Estado).
Varios intelectuales y científicos norteamericanos han indagado en ese mundo de la superstición y la credulidad, constatando que en dicho sector la mayoría viven del fraude y la mentira. Lo relevante, es el hecho que la superchería cuenta con el respaldo, con la credulidad de sus habitantes. Cada libro de estos personajes – y son escritores prolíficos – son “best sellers”, para felicidad de las editoriales.
Escarbando en ese sector, aparece coherente la existencia de un personaje como Donald Trump, quien aconseja beber lejía contra el Covid-19; pareciera explicable su irresponsabilidad e incompetencia para ejercer la presidencia de los EEUU. La megalomanía de Trump, encuentra su base de apoyo perfecta, justamente en la ignorancia de ese sector significativo de la población que es manipulable, siempre a la espera del acto mágico, siempre a la espera del personaje hacedor de milagros.
Si pese a la peligrosa situación actual, el pueblo norteamericano logra llegar a noviembre de este año, el evento electoral tal vez devele si la ciencia norteamericana logra vencer a la pseudociencia, si la cultura norteamericana logra dar un paso sustancial para vencer a la contracultura en el futuro.

domingo, 3 de julio de 2022

INSTANTE DE FANTASÍA

Fantasías , de la red 





En estas mañanas, comienzos de verano aquí en Montréal, suelo salir a la terraza, en el jardín posterior de la casa. Me siento bajo el “gazebo”, para recibir el aire que llega en brisas refrescantes de tanto en tanto.... La clorofila es abundante en el traspatio. Durante el fin de semana cesan los ruidos de tráfico, todo es un silencio verde. Algún pajarillo cruza raudo por el patio..., y de pronto..., miro el cielo, la bóveda azul bajo la cual existimos... Azul..., ni una nube, límpido azul. Y zaz -la imaginación es una cualidad maravillosa -, espontáneamente mirando la bóveda azul, aplico el zoom, pero no para acercarme, sino para alejarme. El zoom, hacia atrás, hacia atrás... Y entonces mi imaginación provoca el milagro... Todo se empequeñece, yo, y el globo azul en el cual vivimos. Se empequeñece tanto, que yo y el mundo, el planeta Tierra, desaparecemos... Ya no existo. Me he transformado en parte del infinito..., palpitación cuántica intermitente... A pesar de todo, mi herencia terrenal me recuerda a Epicuro: “La muerte es una quimera: porque mientras yo existo, no existe la muerte; y cuando existe la muerte, ya no existo yo”.
El verde de la clorofila, junto con las suaves brisas del aire, me han provocado el instante de ilusión que no le hace daño a nadie, es terapia espontánea. Regreso del infinito, sonriente, sintiendo que mi mujer me ama tanto como yo a ella, y que hijos y nietos, conservamos incólume nuestro mutuo cariño...
Con mis mejores deseos, buen fin de semana.

STRIPTEASE

Democracia Norteamiricana






Se mueve sinuosamente..., se desliza..., se tiende..., se incorpora..., se ofrece al alcance de la mano..., excita, sin duda excita... Sabe que está engañando, pero su atractivo escénico obnubila a todo el mundo. Lo imposible parece posible, eso se ha encarnado de Sur a Norte, de Este a Oeste. Todo parece espontáneo, aunque sus movimientos, la puesta en escena, están perfectamente calculados: la Mentira, gira como un carrusel de ilusiones, feliz, porque ha logrado parecer autónoma, se ha encarnado en el sentimiento de multitudes. (Honor, a quienes todavía saben elegir la Verdad contra la Mentira). Porque ésta, en EEUU, se ha convertido en el “sentimiento” de miles de personas. Iniciada por el narcisismo patológico de Donald Trump, y con el apoyo de sectores significativos de los capitales norteamericanos, hoy la Mentira en EEUU, luce su desnudez y cinismo con tal impudicia, que resulta difícil encontrar un parámetro semejante en la historia política de la humanidad. En actitud provocadora, la Mentira apoya el portar armas en lugares públicos, coarta la libertad de las mujeres (tenían más derechos sus madres y sus abuelas). Como hábil jugadora de ajedrez, la Mentira, ha puesto en jaque a la Democracia Norteamericana.

“EN CHILLÁN PLANTÉ UNA ROSA…”

 Atalaia 2017






Descansando un instante del sin sentido que entregan diariamente los medios de información, decidí revisar unos escritos que tal vez un día sean parte de mis memorias. Y me encontré con un fragmento que intenta dar una semblanza de mi ciudad natal en 1940.
Muchos vestigios del terremoto de Chillán de enero del 39 quedaban todavía en mi ciudad: muros destruidos, sitios eriazos con escombros y por supuesto muchos edificios y viviendas en proceso de renovación o construcción.
Chillán de aquellos años aún tenía una fuerte presencia rural en su paisaje urbano, en sus habitantes, y en su espíritu. Dentro del cuadrado de las cuatro avenidas, varias calles eran simples terraplenes y otras poseían adoquines. Las más antiguas conservaban todavía piedras de huevillo, y más tarde de adoquines. Más allá del perfecto cuadrado de las cuatro avenidas, crecían las “poblaciones” que rodeaban la ciudad.
Reforzando la presencia rural en mi ciudad de aquel tiempo, en las mañanas entraban a Chillán carretelas con productos de las chacarerías y huertos cercanas que se instalaban en un costado del Mercado, creándose allí una Feria Libre. Pero no solamente carretelas, porque también llegaban carretas que viajaban 20 o 30 kilómetros para participar en aquella Feria. Los campesinos venidos de lejos se quedaban en la ciudad, durmiendo bajo la carreta, hasta liquidar su mercadería vendiéndola a veces “a precio de huevo” (serían baratísimos los huevos, supongo).
La leche, se repartía por las calles de la ciudad a caballo o en carretela, traída de los fundos cercanos que también solían ofrecer panes de queso añejo y queso fresco expandiendo su perfume en el aire.
Del mismo modo entraban a la ciudad las carretas de carbón, pequeñas, estrechas, con ruedas de madera maciza y altas barandas de ramas. Pasaban por las calles vendiendo carbón a granel con su medida del almud, o en sacos que aportaba el cliente: “¡Caarbón, caaarbón!!”
Así mismo, entraban a Chillán recuas de mulas venidas de la costa, cargadas de cochayuyos y “pescá seca” (pescadilla), además de ristras de cholgas y piures secos: “¡Coochayuyo y pescá seca, cooochayuyo y pescá seca!”
Quiero decir, que el campo y su gente entraban diariamente a la ciudad.
Chillán, además de tiendas y almacenes, contaba con diversos maestros y vendedores ambulantes: soldadores; hojalateros; ropavejeros; afiladores de cuchillos; vendedores de frutas, de dulces; vendedores de diarios y revistas; barquilleros; heladeros; el elegante “vendedor viajero” que tocaba a tu puerta ofreciendo joyas, relojes, lapiceras, cortes de tela; etc., etc., etc.. Todos, recorriendo la ciudad, anunciándose con gritos publicitarios, con pitos, cuernos, en fin.
Eran tiempos en que pasaban volando por los cielos de Chillán, grandes bandadas de “choroyes” de sur a norte o de norte a sur, dependiendo de la estación del año. En aquel tiempo los choroyes eran los barómetros del tiempo, anunciaban buen o mal tiempo, dependiendo en qué dirección volaban. Era una época en que los temporales, se anunciaban con una gran manta negra de nubes, que surgía por el horizonte del norte de la ciudad, y un par de horas después llovía dos semanas seguidas y más.
Las calles de Chillán en sentido Este-Oeste se transformaban literalmente en ríos, porque todos los años se desbordaba “el Canal de la Luz” y/o el Estero de las Toscas que corría un trecho por el lado Este de la ciudad para bajar luego hacia el Oeste.
Y claro, ironías de la vida, el barrio más afectado, el que pasaba las peores tristezas del invierno solía ser “Villa Alegre”, que quedaba hacia el Oeste, cruzando la línea del tren, avenida que terminaba en el Cementerio de la ciudad.
Pero en fin, además de vivir en una ciudad que tenía muy presente el mundo agrario, yo tuve una relación directa con ese mundo por raigambre materna, a 46 kilómetros hacia el sudeste de Chillán. En el pueblo de El Carmen, subiendo hacia Los Puquios, viví años fundacionales de mi personalidad.

sábado, 18 de junio de 2022

ABUSADORAS



Mis amadas nietillas  Aiala y Maider la fotografía es de Bego





No hace tantos años, solíamos encontrar sorpresivamente en el “fondo del baúl”, documentos o fotos que creíamos perdidos. Hoy, esas sorpresas, las encontramos en el fondo del “Disco Externo” (¡tingla pitinga!). Allí encontró Bego, una foto, en la que un par de pícaras, aprovechándose que mi corazón se convertía en almíbar ante su presencia, me utilizaron como un maniquí para sus prácticas de peluquería. Mi ego, que canta como la ranchera: “voy a sacar juventud de mi pasado”, clama venganza: ahora con sus 13 y 15 años respectivos, cuando las encuentre, sentiré el placer que, desde el fondo de la historia, el Euskera, lengua de los vascos, vendrá en mi ayuda, porque ellas me llamarán Aitxitxi, en vez de abuelo.

viernes, 17 de junio de 2022

ESCAPISMO SIN DISIMULO


No soy de los que afirman que “todo tiempo pasado fue mejor”, pero que eran otros tiempos, eran. Yo me voy al tiempo en que el organillero recorría las calles de mi ciudad y desde sus tubos emergía:

“Cierto pajarillo una mañana
herido fue a caer a mi ventana
yo me compadecí del pajarillo
y yo le di el calor que le faltaba.
Lo puse en una jaula primorosa
lo cuidé con afán de noche y día
y al ver que el pajarillo se moría
le di la libertad que me pedía.

ESTRIBILLO

Pajarillo, pajarillo,
que vuelas por el mundo entero
llévale esta carta a mi adorada
y dile que por ella muero.
Si en la memoria de alguien, aún suenan esas notas, vivirá algunos instantes de inocencia. 



Con mis mejores deseos. Chao












LA CONFIANZA EN SÍ MISMO


Puede ser una imagen en blanco y negro de 1 persona
Miguel de Unamuno 




Cuando en 1905, el rey Alfonso XII le otorgó a Miguel de Unamuno la Gran Cruz de Alfonso X Sabio, el escritor comentó:
-Me honra, Majestad, recibir esta cruz que tanto merezco.
El monarca le contestó:
-¡Qué curioso! En general, la mayoría de los galardonados aseguran que no se la merecen.
A lo que el escritor replicó al Rey:
-Señor, en el caso de los otros..., efectivamente no se la merecían.