Sobre los temas culturales debo hacer una pausa.
Desde la Corte Suprema de los EEUU ha salido un hedor nauseabundo que resulta imposible ignorar.
Algo está podrido en esa Corte: han acordado un impúdico apoyo a un candidato a la presidencia en Noviembre: un petulante candidato sobre el cual pesan 94 juicios pendientes: insurrección, fraudes económicos, sedición, violaciones, e incluso probable venta a países extranjeros de documentos “top secret”.