Hoy, 28 de Febrero 2013, el diario El País de
España, entre sus titulares de primera página, destaca uno : « La
Patria vale más que la democracia ». Luego el artículo reproduce algunos
fragmentos de lo dicho – el 6 de Febrero - por el señor Juan Antonio Chicharro,
comandante general de la Infantería de Marina (un cuerpo con más de 4.000
militares) hasta diciembre de 2010. Entre ellos, El País resalta otra frase
dicha por el mencionado general :
« La patria es anterior y más importante que
la democracia. El patriotismo es un sentimiento y la Constitución no es más que
una ley ».
« El general Chicharro está en la reserva –
según continúa señalando el diario -, pero no retirado. Sigue sujeto al código
disciplinario castrense, que castiga al militar que “exprese públicamente
opiniones que supongan infracción del deber de neutralidad en relación con las
diversas opciones políticas o sindicales”. Además, está destinado en la
asamblea permanente de la Real y Militar Orden de San Hermenegildo, un selecto
órgano asesor del ministro de Defensa en materia de recompensas que evalúa la
“conducta intachable” de los militares ».
Hasta ahí el diario. Yo, como lector de El País y
televidente de algunos programas de TVE, me doy cuenta que la situación en
España está difícil y va a peor, reafirmado por los pronósticos de los
analistas españoles y agencias internacionales. Como resultado, la corrupción
ha invadido – nunca mejor dicho – de Rey a paje, transformándose en una
pandemia.
El mundo financiero y grupos económicos
transnacionales, por una parte han especulado tan insaciablemente, a la vez que
nos han excluido de sus beneficios, que nos han convertido en reos de sus
manejos. Con la paradoja que de ese modo los carceleros ahítos de valores y
dinero también han quedado entre rejas :¿para qué producir bienes de
consumo si disminuye el poder adquisitivo ? ¿Para qué prestar dinero si no
hay capacidad de pagar el crédito ?...
Ahora bien. Que el capital, investido de interés
patriótico, recurra a sus FFAA cada vez que se siente amenazado, nos lo enseñó
a los latinoamericanos, justamente Europa : « La Patria es anterior y
más importante que la democracia ». ¿A alguien le resulta desconocida esa
frase ?
De tal manera que no debería sorprendernos si el
descanso democrático que la vieja Europa se ha tomado en estos años se troque
cualquier día en un jaque mate, con Rey…, o con Príncipe…, (incluso con nuevo
Papa) que para el caso son y serían decorativos, aunque excesivamente
dispendiosos.
Y entonces, pensando en algunos otros países europeos,
vino a mi memoria aquello de : « Cuando las barbas de tu vecino veas
pelar, pon las tuyas en remojo ».