Roberto Matta, El nacimiento de América |
"Las fuerzas de la Historia", " el peso de la
Historia", "las leyes internas de la Historia".
En fin, el intento de definir si la Historia es una especie
de "ente" que nos modifica al mismo tiempo que colaboramos en su
modificación, tal vez sea hoy una tarea
ociosa aun para los filósofos.
A propósito de este mes de
Septiembre, que para nosotros los chilenos sigue siendo un mes complejo - un
mes de esperanza y tragedia -, la Historia me resulta misteriosa: tal vez un
"ente" abstracto, independiente, y a la vez concreción humana.
Si ella fuera sólo esta última - concreción compuesta por millones de
individuos - sería plausible pensar que esos
millones no supimos dilucidar lo que marcaba la brújula de la Historia. No me refiero solamente a Chile,
obviamente.
No quiero decir con esto que aquella esperanza que había surgido en 1917, y que parecía renovarse en Enero de1959 fuera una simple utopía, un sueño de imberbes. Sucede que
mirando el siglo XX desde el presente, constato una obviedad, se equivocaba una
pancarta que afirmaba: "El futuro pertenece por entero al
socialismo". La brújula de la Historia marcaba otro rumbo para el mundo
entero: la globalización que vivimos hoy con todas
sus grandezas y miserias, tal vez más de estas últimas para las mayorías.
Si alguien supiera dilucidar qué pasó, dónde estuvo el error... Indagando en nosotros mismos
seguramente encontraremos más de alguna pista...
Roberto Matta, La vida allende la muerte |
La Historia Social pareciera desarrollarse como el mar, ola
tras ola. Los huracanes suelen dañar más los árboles que las peñas y rocas costeras. Sin embargo el trabajo constante del
mar viene modificando las costas milenio tras milenio, siglo tras siglo, a
veces imperceptiblemente, otras
sorprendiéndonos con el cambio.
La mayoría de quienes vivimos durante el
siglo XX en plena madurez no seremos ejecutores ni testigos de la transformación que sucederá durante este siglo XXI. Siglo
no muy auspicioso socialmente, todo hay que decirlo.
Sin embargo mientras tanto no podemos evitar vivir la
simbiosis entre el presente y el futuro: somos colaboradores y víctimas de la Historia.